Si te apetece vivir un fin de semana diferente, ¡te traemos el plan perfecto! Aprovecha que seguimos con viajes a todos nuestros destinos este mes de Septiembre y hoy en nuestro blog toca hablar de uno de nuestros viajes a la historia, la visita a la Isla de San Simón.
La isla de San Simón pertenece, junto con la isla de San Antón y otros islotes más pequeños, al archipiélago San Simón que, situado en la Ría de Vigo al sur de la ensenada que lleva ese mismo nombre,, fue catalogada de Bien de Interés Cultural en la categoría de Sitio Histórico en el año 1999.
Actualmente deshabitada, son muchas las visitas a la Isla de San Simón que se realizan cada año, pues su historia hace que sea un lugar de gran interés turístico.
La Isla de San Simón fue empleada como monasterio, cárcel para presos políticos, lazareto e incluso como orfanato. La isla, de la mano del arquitecto pontevedrés César Portela, fue convertida en un espacio protegido, regenerando sus jardines y especies arbóreas. Toda la recuperación estuvo enfocada hacia una función cultural, dotando a la isla de un auditorio, una biblioteca, una escuela de mar, hotel y restaurante.
Gracias a esta potente reforma, se empezaron a realizar actividades culturales como los Premios Xerais, el Premio Merlín o el famoso festival Sinsal.
fuente: vigolowcost.com
La riqueza cultural ha mejorado las visitas a la Isla de San Simón
Hoy en día, el archipiélago es muy visitado. La Isla de San Simón, conocida actualmente como “A Illa do Pensamento”, se ha convertido en un centro de reflexión y creación cultural de mucho interés para artistas y pensadores. El objetivo de Francisco Javier Alonso, creador de este proyecto que otorga un nuevo nombre a la isla, es promover que las visitas a la Isla de San Simón se empapen de cultura gallega.
La nueva distribución y fisionomía que se le ha dado a la isla, hace que tanto los espacios exteriores como las salas de los edificios, sean una zona perfecta para exposiciones de artes plásticas. De hecho, en toda la isla, estanques, vestíbulos, cementerios o en el medio de los árboles, podrás encontrar esculturas de destacados autores gallegos que hacen de bienvenida a todas las visitas.
En esta increíble isla de la Ría de Vigo, vive la historia que a día de hoy sigue siendo de inspiración para múltiples artistas. El arte convive con la arquitectura y con la naturaleza, haciendo de esta isla, un auténtico espectáculo cultural y una opción perfecta para una escapada de fin de semana.
Los islotes Cobreiras y Pena Blanca completan el archipiélago San Simón, un conjunto de islas que presenta una riqueza paisajística rica en parques y jardines con personalidad propia forjada con el paso de los años y de la historia.
Resaltamos la vegetación cercada por el mar que contribuye a esa seña de identidad propia que atrae a las visitas a la Isla de San Simón. La vegetación mezcla palmas canarias con castaños de Indias, acacias, eucaliptos, cedros del Atlas y camelias japonesas entre otros, formando una armonía perfecta entre especies autóctonas y foráneas.
La famosa ensenada de San Simón, próxima a la tierra, conforma una lengua de arena que mira hacia las islas. Aguas saladas y dulces conviven en esta ensenada debido a la desembocadura de los ríos Verdugo y Maceira, lo que ayuda a crear un ecosistema único con esteros y zonas de marisma.
Con la marea baja, esta ensenada se convierte en el escenario perfecto para grandes colonias de patos y aves. Entre las especies que se pueden observar con frecuencia en esta zona, destaca el bilurico, el mazaricano chiador y el chorlito gris, sin olvidarnos nunca de las gaviotas y cormoranes.
El manto vegetal que cubre las praderas de zosteba, alberga una gran variedad de crustáceos, moluscos y cefalópodos.
fuente: cultura.gal
Las visitas a la Isla de San Simón buscan combinar su naturaleza con su largo recorrido histórico
Si el famoso capitán Nemo de las Veinte mil leguas de viaje submarino, se acercó a la Isla de San Simón maravillado por sus leyendas, ¡tú no te puedes quedar atrás!
Sin previos conocimientos de que esta isla estuviera habitada antes del siglo XII, la llegada de un monasterio en dicho siglo que permanece activo hasta el siglo XIII, marca el primer período histórico de esta isla de la Ría de Vigo. Las épocas posteriores a la edad media estuvieron marcadas por múltiples batallas navales e incursiones corsarias, que llevaron a que la isla pasase de ser un lugar religioso a un lazareto marítimo.
A comienzos del siglo XX, la isla abandona su faceta de aislamiento de enfermos para formar un escenario más amargo todavía y convertirse en el lugar de reclusión de presos políticos durante la Guerra Civil y la posguerra española.
Sin embargo, este oscuro episodio de la isla no ha hecho que pierda su verdadera identidad y hoy en día destaca como escenario cultural y paisajístico y como uno de los grandes sitios de inspiración de Galicia. Sus momentos históricos le han dotado de una fuerte personalidad que retumba en las paredes de los edificios y que hace que todo artista gallego quiera visitarla, al menos una vez en la vida. Su pasado milenario ha fortalecido su patrimonio, fomentando que cada vez sean más las visitas a la isla de San Simón que se hacen cada fin de semana.
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